Construye tu propio camino hacia el éxito, y al llegar moldéalo como tú creas.
No corras hacia la meta, establécela.
No sigas el éxito de otros, construye y fortalece el tuyo.
Cada suceso trae, tras de si un antecedente, al cual tu puedes anticiparte. Edúcate cada día en la habilidad de tener una mente proactiva. Encuentra la solución, cuando el problema apenas si se vislumbra. Sé un visionario, date cuenta de tu verdadero potencial de anticiparte a los hechos. Avanza siempre, piensa todo el tiempo, desarrolla ideas creativas. En tu mente la palabra “absurdo” o “imposible” no existen. De hecho, las fronteras que te limitan, aún no han sido levantadas. Toma las oportunidades, todas y cada una de ellas, eso sí, solo aquellas que traerán beneficios para ti, para quienes amas y para tu comunidad. No seas facilista, lo fácil es efímero. No aguardes a que alguien anime, el ánimo vive y habita dentro de ti. No esperes ser presionado, por el contrario presiónate tu mismo, cada día.
Sonríe, sé positivo, alegre, optimista, bromea cada vez que puedas y abraza, si nada te lo impide. Conviértete en un entusiasta de los sueños más locos. Devora libros, revistas, páginas web y todo aquello donde la información abunde y te permita llegar a nuevos planos de la imaginación. Idea todo el tiempo, sin poner en riesgo tu integridad, que se enciendan mil bombillas de pensamiento, sobre tu cabeza. Disfruta el escuchar y aprender de los demás, interésate por todos los temas, aunque poco tengan que ver con tu profesión. Analiza en profundidad las situaciones de la vida y descubre en ellas una enseñanza. Ilusiónate con ser mejor cada día, visualízate superándote a ti mismo, convirtiéndote en tu mejor rival a vencer. Piensa en lo que quieres y ve por ello, establece objetivos y con todo el entusiasmo de tu corazón, alcánzalos. Fíjate en cada logro que vas alcanzado, la forma en que lo lograste y entiende tu potencial para crear y pensar de forma original. Amplia tus horizontes, disfruta de nuevas culturas y formas de hacer las cosas. Entiende que la vida es cuestión de actitud, esa misma que te lleva a desarrollar tus aptitudes. Enfrenta la vida, rétala, llévala al límite. Relaciónate con tantas personas como puedas, hazte amigo de todos si lo quieres. Repite cada día tus conductas positivas, hasta hacerlas hábito. Se persistente, optimista, toma una posición y oponte para crear tus propias premisas. No te quejes, las lamentaciones son helechos, en un desierto seco. Busca el acierto que siempre se oculta tras el error, idea situaciones, juegos, procesos, recetas, bosquejos. Y sin ser un experto crea un mundo que sea ideal para todos, de ahí, saldrán grandes ideas. No pierdas tiempo cambia hoy mismo, ve por tus nuevas oportunidades. Márcate un objetivo este mismo día. Anticípate a la solución de una situación, que sabes sobrevendrá. Haz algo diferente, o compórtate de otra manera. Emprende esa acción a la que tantos rodeos, has venido dando. Olvídate del fracaso, solo persevera una y otra vez, hasta lograrlo.
¡Vamos…estoy seguro que puedes ser, un genio proactivo!
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