miércoles, 19 de diciembre de 2012

¿Qué Tanto te Afecta la Navidad?


Modificaciones de horario a causa de los viajes, cambio en los hábitos alimentarios,  incremento de los gastos, sensación de soledad. Reavivamiento de culpas y conflictos, sedentarismo de las vacaciones, abuso de calorías y alcoholes. Todo esto ocurre durante una bella época del año llamada Navidad.
Y de su mano viene un aumento en la incidencia de estados de ansiedad y depresión. La navidad es sinónimo de unión, pero también de caos, de carreras alocadas por hacer las compras a tiempo; de un consumismo excesivo e irracional. Las dificultades económicas que en meses anteriores eran sorteables, se hacen evidentes durante esta fecha.
Las tradiciones por otra parte terminan siendo una dolorosa espina en el corazón de quienes han sufrido pérdidas o rupturas recientes.  Además de esto, otra razón a la cual los expertos adjudican la ambivalencia alegre y depresiva de estas festividades. Es que no todos los individuos poseen los mismos ciclos psicológicos, y se ven forzados a participar en dinámicas sociales, laborales y familiares; que terminan siendo más un lastre, un deber, que una real celebración.
Este malestar anímico sumado a la ingesta de alcohol y comidas repletas de picantes, azucares, y grasas; se traduce en cambios de humor, amargura, conflictos, consumismo. Cuyas cifras se pueden calcular al final del año.
La navidad también trae consigo simuladas e inestables reconciliaciones, pensamientos obsesivos, necesidades repentinas; dificultad para concentrarse en las labores habituales, o sensación de falta de ocupación, y un deseo ingente por realizar actividades de todo tipo. Esto termina por agravar la sensación de vacío.
Al enero siguiente, por supuesto, la mayoría de las personas sufrirá del síndrome postvacacional.  El cual se caracteriza por la dificultad de adaptación después de un periodo de ocio; generando molestia y bajo rendimiento a la hora de reincorporarse a las actividades cotidianas. Este síndrome tiene síntomas tanto psíquicos como físicos y se traduce en ausentismo y consultas médicas, concluido el periodo de fiestas.

Navidad Feliz Navidad

¿Y a ti como te afecta la navidad?

domingo, 16 de diciembre de 2012

Romper el Molde, Salir del Pasado y Vivir


Si hay una característica que define la vida es que constantemente avanzamos, es imposible detenerse siempre vamos a algún lado. Incluso la muerte, al igual que el nacer es de algún modo llegar a otro lugar. En ese avance vivimos experiencias, algunas se presentan novedosas y agradables, otras no tanto. Y en algunos casos, lo que hemos vivido debe quedar en el pasado. Esa es la consecuencia del movimiento constante.
El vivir implica generar apegos: por las personas, los lugares, las experiencias vividas, los buenos momentos. Pero como en cualquier viaje, no todos nos dirigimos hacia el mismo destino; algunos descenderán antes, otros ya habían establecido otra ruta, incluso algunos no llegaran a donde planearon. Por supuesto, sentiremos nostalgia al saber que nuestro viaje continúa y esas amistades, afectos y camaraderías no nos seguirán acompañando. Entonces aparecerán otros y nos sentiremos contentos, pero en este viaje todo es incierto y tampoco sabemos si ellos seguirán con nosotros.
Bien, esto ocurre para dejarnos una enseñanza, y es que bajo cualquier circunstancia debemos continuar nuestro camino, seguir avanzando. Y esas personas que van yendo y viniendo, viviendo y muriendo, estando y partiendo; aparecieron ahí para dejarnos una enseñanza. Porque su presencia física se irá diluyendo con todo el pesar que esto genere, empero, su afecto, comprensión, solidaridad y cariño; seguirán como un legado que nos entregan.
Puede sonar crudo, pero es demasiado simple aunque no lo parezca: la añoranza no revive a las personas, no paga tiquetes de avión, no reactiva sentimientos, ni deshace errores. Tampoco la maquina del tiempo será inventada, por eso la mayor necedad de una persona es seguir atascada en el pasado; añorando lo que un día pareció ser  maravilloso, gratificante y pleno. Por tanto, el único camino que queda es valorar el recuerdo y la enseñanza recibida.
De cuando en cuando se puede dar una ojeada al pasado, para mirarlo con los ojos que corresponde; como aquel archivo de memorias en las cuales encontrar algún recuerdo, que pueda resultar útil y aplicable a lo que vivimos en este momento llamado presente. El cual a su vez es tan efímero, que cuando tecleo para decirte esto, ya se ha convertido en pasado. Recuérdalo estamos en movimiento constante.
Vive de la satisfacción de lo que hiciste, no te apalees por los desaciertos; mira a tu alrededor  ¿Te sientes solo? Descuida, ya vendrá alguien para hacerte compañía. Sigue siempre tu camino, no hagas estaciones de las que no te sientes seguro, ni desciendas para establecerte por simple nostalgia o capricho. No olvides que es tu vida lo que está en juego.
No te encadenes a nada, no cargues grilletes por gusto; ni te aferres a la banca cuando incluso el piloto ha descendido. No compares lo que fue tu vida, porque es un recuerdo vago e impreciso que jamás podrás alcanzar. Afronta y disfruta lo que la vida te plantea, y encuentra en ello lo gratificante; toma todo lo que puedas. Entiende que en breve también será pasado, tan solo maravillosos recuerdos. Agradece a Dios, o en quien tú creas, el haberte permitido vivirlo, y enfila tus pasos hacia el único que lugar que puedes ir: hacia adelante. Recuerda la vida es un avanzar constante.
No evoques con nostalgia el pasado. Si, pudo ser maravilloso. Pero jamás podrás vivir lo mismo dos veces, este es el premio de la exclusividad llamada vida. Las emociones y sentimientos se hacen nuevos cada instante, cada vez que tomas un nuevo respiro eres otro, alguien que incluso se va dejando a si mismo.   
No cargues tantas piedras, mucho menos tan pesadas; a donde te diriges  no vas a necesitarlas. No te hagas daño con recuerdos, puedes tomar un reloj y devolver sus manecillas, pero el tiempo seguirá siendo exactamente el mismo. No lo olvides solo puedes ir hacia adelante.
No sientas culpa por lo que pudo haber sido, deja el recuerdo y la culpa en el mismo sitio. Acepta que la vida te plantea retos y constantes decisiones, que se trata de ti siempre andando.
Acepta tu realidad tal como sobrevenga, haciendo lo posible por mejorarla; no juzgues la vida en términos de justicia, la realidad es tan justa como tú mismo la concibas, como procures hacerla para tu propio caso.
Acepta la vida como un viaje constante, con sus altas y bajas; comprende que todo el tiempo estás aprendiendo. Asume siempre una actitud proactiva, mira el pasado solo como un archivo informático; habitúate  a los cambios. Ten confianza en el futuro, olvidándote de lo que te aqueja, te molesta o te inhibe. Recuerda, en un premio estar vivo y poder seguir avanzando.

jueves, 13 de diciembre de 2012

Aprendizaje Social o Libertad de Pensamiento


El aprendizaje social es un proceso observacional, en el que se toma un modelo comportamental y se imita. Nuestra especie básicamente, aprende de esa forma las conductas determinadas, que luego hacen parte integral de la sociedad en general.
La observación determina el aprendizaje. Es un proceso de imitación donde el entorno social y el comportamiento son recíprocos. Este proceso de aprendizaje parte de la habilidad de nuestra mente para archivar imágenes y lenguaje. Por ende entornos competitivos tenderán a formar un carácter competitivo en las personas. Efectos estos que se acentúan desde los primeros años de infancia.   
Claro está que es el individuo quien decide, si lo observado será imitado o no, y depende también de factores personales como: motivación, capacidad de atención y de asimilación.
Sin embargo, algunos estudios demuestran que la conducta social diluye la individualidad y hace que las personas cedan fácilmente, ante cualquier tipo de tendencia o presión social. Aun cuando en algunos casos vaya en contra de la propia lógica. El comportamiento de masas a veces resulta irracional.
Es importante no conformarse con la norma, ser crítico y evaluar si la influencia de otros, está modificando la conducta; para integrar por fuerza la de todo un grupo, incluso en contravía de las propias creencias.  
Por ejemplo, usted no debería reír por un chiste que no considera gracioso, simplemente por que los demás ríen. Por el contrario, debe tomar conciencia de si mismo dentro de la conducta grupal; hacer un paréntesis, reflexionar y decidir.
A veces es necesario ir contra la norma, por supuesto, sin dañar a otros ¿Sabe usted como se les llama a quienes lo hacen? PERSONAS EXITOSAS.
El poder que tiene la presión social arrastra la conducta a una continua e inexplicable imitación. Por eso aunque su respuesta pueda parecer incorrecta dentro del concepto general, no tema exponerla, en muchos casos será la correcta.
Las personas fácilmente ven la realidad como la ven los otros, incluso si su concepción  es totalmente errada. La realidad se forma como el resultado de una suma colectiva, pero de seguro existen otras realidades, algunas de ellas ampliamente funcionales.
Debemos percibir el mundo con nuestros propios sentidos; movernos hacia donde queremos, no a donde nos dirige la multitud. El deseo de pertenecía a un grupo, no es excusa para someterse ni perder el concepto de individuo.
Recuerde que para poder avanzar, a veces tendrá que dar la espalda.

sábado, 8 de diciembre de 2012

Lectura: La Reingeniería De Las Neuronas

Leer una entretenida historia, una novela épica. Un poco de suspenso aquí y algo de horror por allá; transportarse a mundos mágicos o dejarse cautivar por las líneas del romanticismo. No solo resulta entretenido, sino que contribuye además al crecimiento de tu cerebro; estimulando la aparición de nuevas conexiones neuronales y fortaleciendo diversas zonas relacionadas con el aprendizaje. Si, tal y como lo oyes. La lectura es el ejercicio más saludable para tu cerebro. Por ejemplo, la literatura surrealista que se adentra en la profundidad del subconsciente, hasta tornarse casi confusa; estimula un mayor raciocinio.
Expresiones muy típicas de la naturaleza siempre libre y espontanea del escritor tales como: La  noche matizada de blanco o el muerto que vivía en frente.  Contradicciones estas, conocidas como oxímoron (Dentro de la retorica, es una figura que consiste en usar dos conceptos de significado opuesto en una sola expresión, que genera un tercer concepto. Esto fuerza al lector  a comprender en ello el sentido metafórico). Generan una intensa actividad en el área frontal izquierda del cerebro, al tener que usar una cantidad mayor de recursos en el proceso cerebral. En otras palabras ejercitamos a nuestro cerebro, lo hacemos más inteligente.
Esta búsqueda de interpretar  lo racional, lo automático y lo absurdo, crea una necesidad mental; un reto de abrirse a nuevas opciones. Estimulando  el uso de nuevos patrones cerebrales y desarrollando una mayor capacidad de aprendizaje.
El significado es la asociación esperada con el entorno, es decir un entendimiento lógico y simple de las cosas. Esto habitúa al cerebro a vivir en un mundo “entendible”. La era de la tecnología, televisión, internet y videojuegos, se ha convertido en una fábrica de cerebros perezosos. Baja respuesta a los retos, deficiente rendimiento académico y conformismo.
Sin embargo, cuando nos adentramos en el mundo de la literatura para encontrarnos con escenarios inverosímiles, o desconcertantes; estamos retando a nuestra mente, obligándola a discernir la lógica  dentro de la complejidad. Estamos creando un deseo de dar sentido, a las diversas situaciones a las que habitualmente estamos expuestos, de las que confiamos salir avante cada vez se presenten.
Por medio de la lectura conseguimos un rediseño substancial y una mejora dramática en el desempeño del cerebro. En su calidad de pensamiento, y en la rapidez de respuesta de sus conexiones neuronales. Leer es reinventar la realidad, buscar la raíz de las cosas, cuestionarse; aceitar la “maquina”, activando oxidados procesos mentales. Es el proceso de reingeniería del órgano más importante de tu cuerpo: tu cerebro.
Ya lo sabes, un buen libro no solo entretiene, sino que es el mejor regalo que puedes dar a tu salud mental. 

domingo, 2 de diciembre de 2012

Aprendiendo a Crecer


El tiempo pasa y a medida que las manecillas del reloj corren apresuradas; de ellas penden nuestros sueños y expectativas. El crecimiento económico laboral, social, espiritual y familiar.
Dentro de este escenario, sabemos se presentan eventualidades, factores externos que escapan a nuestro control. Por eso es importante tener planes de contingencia para la vida. Cuando las cosas parezcan ponerse de cabeza, no debemos entrar en pánico; por el contrario, antes de tomar cualquier decisión existen unos planteamientos a tener en cuanta, es decir anticiparnos a la contingencia, y no vernos atrapado en ella cuando se presente. Incluso el crecimiento personal debe darse dentro de unos límites lógicos, realizables y concienzudos. Las expectativas debes ser siempre positivas, pero a la vez realistas, por supuesto, no demasiado conservadoras. Si un hecho inédito se presenta debemos estar preparados, practicando siempre el arte de la anticipación y calcular cómo, diferentes escenarios podrían afectar nuestra vida en sociedad, incluso de forma positiva.
El primer emprendimiento que aparece en tu camino, eres tu mismo. Tu propio ser es tu empresa, del mismo modo que eres padre, pareja, hijo, amigo, ciudadano. Por tanto en cualquier proyecto que adelantes dentro de tu desempeño social; debes determinar la forma en que vas a crecer. Cómo aprovecharás las oportunidades, cual es el montante de tus objetivos, como vas a llegar a ellos; cuanto costaran en factores de dinero, tiempo e inversión de energía. Como cambiará tu vida una vez que vayas alcanzando metas, cuanto esfuerzo requerirá lograrlo. Lo primero que debes hacer es enfrentarte a ti a mismo, convertirte en aliado; reconocer tus objetivos, determinar las cifras conforme a los factores mencionados. Reflexionar las implicaciones que cada decisión tendrá en tu vida, y como esta modificará el escenario en que te mueves. Y estar siempre atento para adaptarte a continuos cambios.
Ten en cuenta que mientras más rápido crezcas y mas alto quieras llegar; más esfuerzo y constancia vas a requerir. Además de buscar en tu interior la fortaleza suficiente, para abandonar algunas cosas que aun siendo preciadas, impedirán ese avance.
Haz proyecciones respecto de cada decisión que vas tomando, cuanto de tu tiempo y energía tendrás que invertir, si realmente vale la pena y sobretodo si es consecuente con tu objetivo general.
Prepárate antes de iniciar a gastar, no solo dinero, sino también tiempo y energía, pues son estos los activos naturales con los que cuentas. Regula el gasto de estos factores, no dilapides lo que vas logrando, manteniendo siempre  una base que te permita enfrentar contingencias económicas, sociales, laborales, familiares y emocionales.
Siéntete a gusto con la exposición social que seguramente traerán tus logros, y no pierdas de vista a quienes te rodean, ellos serán aliados valiosos en tu búsqueda, si consigues ponerlos de tu lado. Si tu meta es continuar creciendo, vas a encontrarte con la necesidad de seguir agregando personas a tus proyectos, no olvides que ellos son fundamentales, no solo para tu salud económica, sino también psicológica y social. Claro está, rodéate siempre de gente que sume y no que reste. Personas entusiastas, positivas, emprendedoras, capacitadas, visionarias y emocionalmente maduras.
Premia con tu reconocimiento a quienes siempre te brindan su apoyo, consejo e impulsan tus ideas. Y sé consiente que a medida que creces, posiblemente también crezca el nivel de estrés al que has estado habituado. Desarrolla una personalidad avocada al desafío.
Escucha consejos a las personas que han desarrollado una sabiduría dentro de los diversos campos en los que te mueves, identifícalos, escúchalos, y aprende de su propia experiencia. Algunos de ellos estarán a dispuestos a brindar sus buenos oficios para tu crecimiento.
Mantente cerca de tus objetivos, y de las personas que te rodean; entérate de cuales son sus propias necesidades económicas, psicológicas, de tiempo y afecto. Evalúa cuando exigen de ti mismo y si realmente vale la pena la inversión para el logro de tus metas. Aprende a comunicarte de manera fluida y dar prioridad a lo realmente valioso, y nunca olvides: Tú, eres el primer emprendimiento de tu vida.